Ante situación climática, finalmente resguardan a migrantes en albergues.

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Operativo se llevó a cabo en colaboración de los tres niveles de gobierno y organismos binacionales.

Luego de más de mes y medio y ante las bajas temperaturas que prevalecen en la ciudad, mediante un operativo realizado en conjunto entre los tres niveles de gobierno y organismos binacionales, más de 500 migrantes que permanecían en un campamento en el bordo del Rio Bravo fueron llevados a los albergues habilitados en la frontera para evitar complicaciones en su integridad física.

La movilización se desarrolló de manera pacífica, pues era necesario evitar daños ante el marcado descenso de las temperaturas y mediante lo dispuesto en un dictamen emitido por el área de Protección Civil en el estado y el municipio, ya que además de los riesgos a la salud de los viajeros, también se contemplan las posibilidades de incendio o alguna persona que llegara a caer en el cuerpo de agua y falleciera.

El secretario del Ayuntamiento Héctor Rafael Ortiz Orpinel informó que se contó con cuerpos de seguridad de los tres niveles de gobierno, fuerzas municipales, estatales y la Guardia Nacional para resguardar la integridad de las personas que encabezaron la reubicación, así como a los propios migrantes, en donde se tuvo total respeto de sus derechos y no hubo ninguna persona lesionada.

Dijo que esta invitación se hizo por la posibilidad de que un accidente se registrara en la zona con consecuencias irreparables, ya que contaban con material flamable y durante las noches encendían fogatas, situación que podría desencadenar en un incendio, además de la falta de salubridad en el lugar y la posibilidad de que alguno se ahogara en el río.

Agregó que como parte del operativo se contó con camiones para poder trasladarlos a los diferentes albergues que se encuentran en la ciudad y se les proporcionó toda la información para realizar su trámite migratorio, con el fin de que puedan lograr su objetivo de una forma segura y en resguardo.

En días recientes, el presidente municipal Cruz Pérez Cuellar detalló que en todo momento se respetó la decisión de los migrantes de permanecer en el campamento, pero insistirían en llevarlos a los albergues, sin embargo, ante el prolongado descenso de las temperaturas era necesario mantener el respeto a los derechos humanos, pero también llevarlos a lugares seguros.

Fueron cerca de 500 migrantes los que accedieron a trasladarse y recibir acompañamiento, mientras que la zona del Río Bravo aún permanece en limpieza y retiro de casas de campaña por la Dirección de Limpia del Municipio.

En la reubicación se contó con la presencia de elementos de Protección Civil municipal y estatal, Comisión Nacional y Estatal de los Derechos Humanos, del Consejo Estatal de la Población, Subprocuraduría de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes, Grupo Beta del Instituto Nacional de Migración, la Organización Internacional de las Migraciones, Secretaria de Bienestar, así como otras dependencias del municipio, como Derechos Humanos, Servicios Públicos, Bomberos y Rescate.

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